Cuando se acerca el verano, una de las cosas que más empieza a apetecer es refrescarse en las horas de más calor con un baño en la piscina.

Eso sí, en una piscina limpia que invite a ese baño y en la que se vea un fondo y unas paredes impecables.

Además, recuerda que la limpieza de la piscina es sinónimo de higiene y seguridad para todos los que se bañen en ella, así que urge emprender esta misión cuanto antes.

En este artículo te explicamos paso a paso cómo limpiar la piscina en distintas situaciones.

Mantenimiento de piscinas

Cómo limpiar el fondo de la piscina

Antes de empezar a limpiar el fondo de la piscina es recomendable limpiar la superficie del agua de restos que puedan estar flotando en ella, casi siempre hojas.

A continuación, conecta el limpiafondos a una manguera y deslízalo con lentitud por el fondo procurando no remover el agua. 

Ahora tendrás que utilizar un cepillo para quitar la suciedad que haya podido quedar incrustada en el fondo y que no haya podido eliminar el limpiafondos.

Esto provocará que aparezca más suciedad, así que tendrás que pasar de nuevo el limpiafondos para, ahora sí, dejarlo todo limpio de forma definitiva.

Cómo limpiar la piscina vacía

Si vas a limpiar una piscina sin agua, lo primero que debes hacer es tomar ciertas precauciones para garantizar tu seguridad. Como mínimo tienes que llevar una mascarilla, unas gafas, unas botas y unos guantes, ya que vas a trabajar con productos químicos. 

Además, asegúrate de que no merodeen niños ni mascotas mientras estás en ello, ya que podrían respirar esos productos.

Lo primero que tendrás que hacer es barrer a conciencia el suelo hasta que quede limpio. Después, pasa un cepillo con salfumán tanto por el suelo como por las paredes. Verás que salen vapores y que tiene un efecto efervescente: no te preocupes, es normal.

Deja que el salfumán haga efecto durante unos 10 minutos. Por supuesto, no olvides llevar puesta la mascarilla durante todo este proceso para no respirar los vapores.

Transcurrido ese tiempo utiliza una manguera para eliminar el salfumán con agua y no escatimes, ya que es muy importante que desaparezca por completo para evitar accidentes. 

Cuando tengas el fondo y las paredes limpias por completo, repara todas las grietas que encuentres. Por último, impregna el fondo con un producto antialgas y, ¡listo! Ya puedes proceder al llenado de la piscina.

Cómo limpiar la piscina de agua verde

Cuando clausuras la temporada de piscina al final del verano y no la vas a vaciar, es recomendable añadir productos al agua que se encarguen de mantenerla limpia y desinfectada hasta la próxima temporada.

Sin embargo, si no la has vaciado y tampoco has usado ese tipo de productos, es posible que te encuentres con que el agua de tu piscina es de color verde.

Aunque su aspecto sea desolador, puedes recuperar tu piscina siguiendo estos pasos.

Cepilla el suelo y las paredes

Una vez que hayas retirado del agua todos los elementos sólidos que haya en ella (hojas, bichos, etc.), utiliza un cepillo de mango largo para frotar con energía tanto el suelo como las paredes de la piscina.

Con esta acción tienes que ir arrancando los restos de suciedad y las algas que se hayan ido incrustando en estas zonas con el paso de los meses.

¿Y qué haces con el color verde del agua? Échale floculante, que se encargará de corregir el pH del agua y de acumular todas las partículas de color verde llamadas flóculos para que las puedas sacar con facilidad.

Puedes encontrar este producto en cualquier tienda que tenga un departamento de limpieza de piscinas.

De esta forma te ahorras tener que vaciar la piscina y volverla a llenar.

Usa un limpiafondos

Ya sea manual o automático, el limpiafondos se encargará de eliminar todos los residuos que se hayan acumulado en el fondo de la piscina como resultado de aplicar el floculante y de haber estado cepillando en el paso anterior.

Cuando lo hayas hecho, pasa el cepillo de nuevo una vez más y echa al agua un líquido antialgas.

 

Limpia los filtros y otros accesorios

Tras meses sin funcionar es conveniente que limpies y revises el funcionamiento de los filtros, las rejillas, los focos, los cestos, etcétera.

Piensa que si alguno de estos elementos falla pueden ocurrir accidentes mientras tú y los tuyos estáis disfrutando de un baño.

Además, es conveniente que pongas los filtros a funcionar cuanto antes, al menos durante 5 horas al día, para un buen mantenimiento del agua y que esta permanezca limpia.

Verifica el nivel de pH y del cloro del agua

Esta será la prueba que te indique que el agua ya es apta para el primer baño. Para ello puedes adquirir tiras reactivas y test en cualquier tienda especializada.

Sigue las instrucciones que te indique el fabricante y comprueba si los niveles de cloro y el pH son los adecuados para que el agua esté en perfectas condiciones para bañarse.

Cómo limpiar las paredes de la piscina sin vaciarla

Hay muchas personas que no prestan la atención debida a las paredes de la piscina, pero también es necesario limpiarlas, pues acumulan suciedad al igual que el fondo.

Es una acción sencilla y puedes hacerlo sin tener que vaciar la piscina. Para ello necesitas un cepillo con mango largo con el que vas a frotar las paredes desprendiendo la suciedad. No tienes que usar productos químicos en esta fase.

Después, solo tienes que dejar que esa suciedad caiga al fondo y, por último, limpiar el fondo de la piscina tal como te hemos explicado un poco más arriba y tendrás tu piscina llena de agua limpia y cristalina.

Cuando emprendas la limpieza de tu piscina, asegúrate de que cuentas con todos los elementos y productos necesarios para llevarla a cabo. 

Algunos de los objetos básicos son un limpiafondos (ya sea manual o automático), una depuradora, una pértiga recogehojas y pastillas de cloro.

Una vez que ya estés “armado” puedes empezar a preparar la próxima temporada de piscina.